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Jordy Caicedo, en el partido de este 11 de junio en Fort Lauderdale. Foto: @LaTri Estas son las calificaciones que merecen los jugadores de la Selección nacional de Ecuador tras su triunfo por 1-0 sobre Cabo Verde en el Drive Pink Stadium, en Fort Lauderdale, Florida. Este cotejo fue parte de la preparación de la Tricolor de cara al Mundial de Catar 2022.
–Alexander Domínguez, sin nota
Qué difícil ponerle nota a alguien que fue un espectador más.–Byron Castillo, 3/10
Con más bajos que altos, perdió algunos balones y no fue ni incisivo ni determinante. Por ahí acarreó un par de pelotas de ataque, pero sorprendió su escaso aporte.–Jackson Porozo, 5/10
Algo nervioso al inicio, sobre todo en el retroceso de la pelota. No hizo una buena dupla con Hincapié en general, en parte por la inesperada presión alta de Cabo Verde, en parte porque estaba consciente de que, de todos los que estaban en la cancha, es el que menos opción tiene de ir a Catar. Con el tiempo, lució más sereno pero, de los candidatos a ser el colega de Hincapié en el Mundial, es el menos calificado.-Piero Hincapié, 3/10
Falló mucho más de lo habitual. Metió un codazo al inicio del primer tiempo que debió ser tarjeta roja, sin atenuante alguno. Perdió varios duelos que, si hubieran sido ante rivales de mayor entidad, hubieran sido catastróficos. Mejor en el segundo tiempo, pero fue porque Cabo Verde prefirió el repliegue.–Pervis Estupiñán, 4/10
Fue otra de las turbinas, pero no estaba concentrado. Estorbó a Ibarra en esa jugada del taquito de Plata. Sus centros siguen siendo una oda a la imprecisión.–Moisés Caicedo, 5/10
Es un deleite verle jugar, pero desperdició todo el primer tiempo intentando asociarse con Mena, que estaba cinco segundos más atrás de lo que se requería. En el segundo halló mejores socios, pero el camino al gol siguió siendo un empedrado.–Carlos Gruezo, 5/10
Menos claro que en otras ocasiones, en el primer tiempo no logró juntarse con los ofensivos. Estuvo firme en la contención.–Ángel Mena, 4/10
Empezó al centro pero debió recostarse a la derecha debido a que los africanos le tenían cerradas las vías de acceso. Salvo un par de jugadas, como ese buen pase a Jordy Caicedo y eso otro a Plata, fue anulado y el entrenador prefirió que no regrese para el segundo tiempo: era claro que, por velocidad, le costaba un mundo acarrear la pelota.–Jeremy Sarmiento, 6/10
Tuvo un destacado primer tiempo, mostrando confianza, encarando sin miedo, triunfando en los duelos 1×1. Fue blanco de muchas faltas cuando los rivales no sabían cómo frenar su repertorio de regates y fintas. Lo malo es que tanta floritura no tuvo mayor peso en los pases finales y, en el balance general, lució más liviano de lo recomendable. No regresó para el segundo tiempo.–Gonzalo Plata, 6/10
El más llamativo por su velocidad (tiene tres pulmones ese caballero) y la cantidad de espacio que conseguía con sus movimientos. Posee un amplio repertorio de tacos, dribles y regates que parecen no terminarse. No aprovechó una preciosa oportunidad de anotar. Se fue golpeado y nos puso a rezar.–Jordy Caicedo, 5/10
Nueva víctima de la poca profundidad general de Ecuador, que apenas juega para el 9. Impecable en el cobro del penalti. Le rompieron el labio al no dar por perdido un balón. Al minuto 60, se fue para dar paso a Leonardo Campana.-Enner Valencia, 5/10
Entró para ser el conector, casi el 10 que se necesitaba para generar pases sorpresivos y ayudó a elevar el juego del equipo. Pero, otra vez, la vehemencia le jugó en contra. A ratos, los africanos recurrían a las manos para frenarlo. En otras, él se frenaba solito: si le daba esa bola a Campana, quizás Plata no se hubiera lesionado.Los demás, sin nota. Hay que reseñar los buenos momentos de Romario Ibarra, que entró al 46 y se fue muy rápido, por lesión. Pero, lo poco que estuvo, quedó claro que es la opción como extremo.
–DT Gustavo Alfaro, 4/10
Horrible primer tiempo, con un esquema 4-2-3-1 absolutamente inútil. Solo el poco oficio de un defensa rival permitió el penalti que salvó esta presentación, gris en su primera parte y algo más colorida en la segunda. Quizás los hombres elegidos eran muy livianos para sacar adelante esta idea táctica. Para el segundo tiempo, con el regreso al siempre confiable 4-4-2 y con Enner y Romario en cancha, el equipo mejoró mucho y generó tres opciones de gol, pero no más. En general, no fue un partido para disfrutarlo, sino para bostezarlo.
Festejo de los jugadores de Ecuador. Foto: @LaTri -

Piero Hincapié, en el partido de Ecuador con México. Foto: @LaTri Estas son las notas y sus respectivas consideraciones de los jugadores de la Tricolor, luego de su empate sin goles con México, este 5 de junio. El partido se jugó en Chicago y es el segundo en la agenda de preparación de cara al Mundial de Catar.
Alexander Domínguez, 7/10
Esta vez se mostró sobrio, atento y coordinado con los centrales. Gran parada de mérito en el primer tiempo. Lástima por Galíndez, pero Dida será el guardameta titular en Catar.Xavier Arreaga, 7/10
Esforzadísimo y valiente, no falló como lateral derecho en el ámbito defensivo, a pesar de que no es su puesto habitual. Lo sacó todo, salvo un par de ocasiones en que alguien fue más rápido, sobre todo cuando los mexicanos aplicaban el cambio de frente para sorprender. Pero resistió y, para sorpresa general, este experimento salió bien, sobre todo porque… ¡no regaló ni un penalti!Roberth Arboleda, 7/10
Es un líder nato. Gritó más que Domínguez y no perdió el compás en ningún momento, excepto en esa jugada del minuto 70, cuando el mexicano Jiménez le ganó las espaldas y casi anota.Piero Hincapié, 7/10
Cuando Ridley Scott se decida a filmar el remake de Gladiator, con seguridad llamará a Piero Máximo Décimo Meridio Hincapié.Pervis Estupiñán, 5/10
Muy activo y con más demostraciones de su talento, sin embargo en esta ocasión se chocó con Romario Ibarra, quizás debido a la falta de tiempo de planificar esa conexión. Cometió una falta penalti al perder la marca, al minuto 77, que el juez no pitó. Todo esto no resta su enorme volumen de juego ofensivo ni tampoco esos centros, que suelen salir desorientados.José Cifuentes, 6/10
No lució como en el duelo con Nigeria, pero dejó en claro que tiene el nivel para ser titular y ponerse a las órdenes del entrenador. Esta vez, esa amarilla del primer lo condicionó para acabar los 90 minutos y debió irse antes.Carlos Gruezo, 7/10
Aportó en la contención y también en la movilidad del equipo. Se entendió a la perfección con Caicedo, lo que permitió que las transiciones entre líneas casi siempre fueran rápidas y, a veces, hasta explosivas. Por ahí, un centro que le salió horrible le costó odiosas comparaciones con Pervis.Moisés Caicedo, 7/10
Estuvo imparable y parecía que, mentalmente, ya estaba jugando el Mundial. Por ahí, todo bien. Pero le dio una patada a Luis Chávez que pudo costarle la roja y casi desata una pelea, pero sirvió para dejaran de castigarle los tobillos. En Catar, lo echaban inmediatamente. En el minuto 86, debió soltar la pelota y dársela a Sarmiento, en lugar de intentar patear al gol, ya sin piernas. Debe conciliar su enorme energía con la toma de decisiones. Esta vez, decidió mal en algunas jugadas.Gonzalo Plata, 7/10
Hay magia en sus zapatos, que parecen compradas en el callejón Diagon. En cada pase, en cada pique y en cada juego de cintura, podían verse chispas de electricidad.Romario Ibarra, 6/10
Muy mal, pero muy mal en la definición, falló dos claras por tiempo. Movedizo y solidario en la marca desde arriba, quizás ya está listo para el Mundial, pues luce mejor que Joao Rojas y (no se enojen) y Alvarado, sobre todo por el oficio y la velocidad. ¡Pero no puede comerse esos goles!Michael Estrada, 2/10
Campana, ¿eres tú? (Aunque es verdad que controló magníficamente la pelota para luego cederla a Romario, que desperdició la oportunidad).Jordy Caicedo, sin nota
Enner, ¿eres tú?Los demás, sin nota. Todos encajaron en el esquema general de Ecuador.
DT Gustavo Alfaro, 7/10
Esta alineación, sobre los papeles, generó algo de recelo. Pero, al final, Ecuador jugó mucho mejor que con Nigeria, donde el juego a ratos fue pastoso, empantanado. En esta ocasión, la pelota corrió con más rapidez y la Tricolor generó más juego ofensivo. Se nota que, como es costumbre, el entrenador estudia a fondo al rival y, por eso, hace cambios a veces profundos en las alineaciones. El gran problema sigue siendo el gol. Y eso le seguirá general a Alfaro la fama de que sus equipos juegan a no perder. No es tan justo decir eso, pero hay que resolver esa falta de definición. -

Enner Valencia, durante el partido con Nigeria, el 3 de junio. Foto: @LaTri Estas son las calificaciones que merecen los jugadores de la Selección nacional de Ecuador, luego de vencer 1-0 a Nigeria, en el estadio Red Bull Arena de Harrison, Estados Unidos. Fue el primer amistoso de la Tricolor de cara al Mundial de Catar 2022.
Alexander Domínguez, 6/10
En el primer tiempo tuvo dos paradas de mérito, una al minuto 27, cuando se impuso en un mano a mano, y luego otra un minuto después, tras un tiro de esquina tras una serie de cabezazos que complicaron a la defensa tricolor. Quedó la impresión de que a veces está a punto de tomar alguna decisión que desconcertará a todos. Se ganó una amarilla por reclamos y tuvo un choque con Torres, absolutamente evitable. Y casi se manda un gol de blooper.Ángelo Preciado, 6/10
Le costó chocar con los nigerianos, que atacaron mayormente por su zona. Cumplió más allá de las expectativas y resultó un poco extraño que no volviera para la segunda parte.Félix Torres, 8/10
Volvió a demostrar destreza para los anticipos y serenidad para afrontar los momentos de apremio.Piero Hincapié, 7/10
Lo suyo es polémico porque tuvo la tendencia a disfrazarse de conductor y trasladar la pelota lo más arriba posible, incluso para hacer pases de gol, pero le fue mal. Hay que reflexionar si esto es un mérito del jugador, una disposición táctica o una evidencia de las falencia de los ofensivos de Ecuador. Tristemente, me parece que es esto último. En lo defensivo, estuvo acertado en los anticipos, pero también falló un par de veces.Pervis Estupiñán, 8/10
Cerró con oficio esa jugada táctica a partir de balón parado que acabó en el gol de apertura, a los tres minutos. De ahí, cumplió con la tarea de generar amplitud en el ataque por la banda y también con la misión de frenar las incursiones de las Súper Águilas. Tuvo la segunda al 81, pero le puso demasiada potencia al remate. Es el dueño absoluto del puesto.José Cifuentes, 8/10
Deslumbró. Más allá de ese remate que estuvo cerca de ser gol, aportó notablemente con las recuperaciones de pelota y con su distribución. Parecía que Enner Valencia y Ángel Mena no le entendían del todo, así que construyó una eficiente sociedad con Moisés Caicedo que se tradujo en el dominio de Ecuador en el medio campo, en el primer tiempo. Luego, debió luchar más cuando los rivales comenzaron a atacar.Moisés Caicedo, 6/10
Quizás pueda reprochársele que no rompió las líneas, pero fue un obrero en la contención. No brilló todo lo que se esperaba.Jhegson Méndez, 6/10
Al igual que Moisés, estuvo mucho mejor en la labor de marca que en la creación de ataque. Estuvo atento para relevar a Hincapié, cuando el zaguero trepaba para ver si podía darle algo de vida al ataque.Ángel Mena, 6/10
Comenzó como un tsunami, como el motor del ataque y el dueño de las pelotas detenidas. Magistral pase suyo para el gol de apertura. Pero se fue diluyendo y sus pases por arriba dejaron de ser punzantes porque Nigeria tapó el juego aéreo. A final, se convirtió en un zombie, para luego salir y dar paso a Plata. Le faltó gasolina.Leonardo Campana, 2/10
Es verdad que también hay que jugar sin pelota, ¡pero denle una, por caridad! Funcionó un poco mejor pivoteando, pero no fue trascendental. Al contrario, en el 57, perdió una de las poquísimas pelotas que llegó a tocar y Nigeria casi anota. Un minuto después, fue sustituido, víctima de la poca profundidad del juego de la Tricolor.Enner Valencia, 2/10
Está listo para la secuela de Forrest Gump, porque no hace un gol, pero corre, corre y corre…Byron Castillo, 4/10
Fue cariñosamente aplaudido por el público, un cálido gesto de respaldo a su situación. Ya en la cancha, los nigerianos lo superaron la mayoría de veces, pero también ganó otros duelos. Los rivales casi no le permitieron desbordar. Cedió unos tiros de esquina por la intensa presión.
Los demás, sin nota. Aunque hay que destacar el entusiasmo de Jeremy Sarmiento y algunos pases de Gonzalo Plata, que también mostró un poco de sus fintas para la tribuna.DT Gustavo Alfaro, 6/10
Fue interesante la idea de Ecuador, al menos al inicio, que en el ataque era un 4-4-2 y que en el repliegue se convertía en un 4-3-3 en que Méndez formaba una línea de tres con Félix Torres y Piero Hincapié. Al inicio, la prioridad eran los pases largos, y luego el juego de Ecuador pasó por las jugadas tejidas, los pases entre líneas y las incursiones, no tan claras. Algo pasó porque, pese a los esfuerzos y los cambios, no hubo la profundidad deseada y, en el segundo tiempo, Nigeria dominó las acciones y estuvo cerca del empate. Los 10 minutos finales volvieron a mostrar a una Tricolor peligrosa en ataque, pero el balance general es que el equipo sufre más de la cuenta, incluso por no saber liquidar al rival en el momento oportuno.
Pervis Estupiñán persigue a un nigeriano. Foto: @LaTri -

Letrero colocado en contra del DT de Emelec, Ismael Rescalvo. Se acabó la primera etapa de la LigaPro 2022 y estos son los 7 fracasos más grandes del primer semestre del Campeonato ecuatoriano. Por supuesto y siendo objetivos, solo hay un ganador y el resto son perdedores. Pero, si enfocamos en los contextos y las subjetividades, los tamaños de las derrotas son diferentes.
7. El portugués sin licencia
En el séptimo lugar está el temperamental entrenador Renato Paiva, que no logró defender con éxito el título conquistado con Independiente del Valle en el 2021. El actual campeón acabó en el cuarto puesto, aunque de todos modos estuvo cerca de ganar la etapa, pero ¡ay!, ese doloroso traspié con Mushuc Runa lo arruinó todo. También tuvo que ver el notable bajón del artillero Jonathan Bauman, máximo goleador de Serie A en el 2021 pero que en este semestre apenas marcó 4 goles. Y también distrajo mucho la revelación de que el luso carecía de licencia Conmebol para entrenar en la Copa Libertadores. Paiva, quien ya percibía que no llegaba con su discurso al grupo como antes, no seguirá en la segunda fase pues aceptó una oferta del León de México. Se fue un poco tarde.6. La mala racha del 9
En el sexto lugar está el delantero Carlos Garcés, quien mantuvo durante toda la etapa una pugna con Gonzalo Mastriani para ver quién era el peor delantero en Barcelona. Al final, Mastriani levantó su nivel mientras que Garcés solo recaudó pedidos de los aficionados para que sea reemplazado por otro 9. Apenas marcó un gol en la Serie A y pasó más tiempo en la banca que en el campo de juego. Le afectó mucho su error en la Copa Libertadores y no logró reponerse para ser protagonista. Al contrario, Barcelona se clasificó a la final de la Serie A a pesar de que Garcés jugó de amarillo. Qué triste.5. El balón invisible
En un fiasco sin precedentes, la LigaPro debió cambiar de balón oficial porque la primera versión anaranjada de Nike era casi imposible de distinguir en las transmisiones televisivas. Al parecer, la pelota se confundía al rodar con la tonalidad amarillenta del césped de algunos estadios del país, algo que aumentaba en las noches y generaba desesperación en la audiencia. Desde la décima fecha se jugó con un modelo predominantemente blanco, el cual sí fue visible. El venezolano Jacobo Kouffati, del Orense, marcó el primero gol con esta pelota, a los 33 minutos, de penalti.
4. El arbitraje, en caída libre
En el cuarto lugar están los árbitros ecuatorianos, permanentemente cuestionados por sus errores. El mal momento de los jueces nacionales está refrendado en el hecho de que ninguno irá al Mundial de Catar.3. Vélez, en la picota
En el tercer lugar está Paúl Vélez, considerado el mejor entrenador ecuatoriano pero que afrontó un semestre de terror en el Macará. Apenas obtuvo 13 puntos y soportó permanentemente la ira de los hinchas celestes, que no están acostumbrados a campañas tan pobres, o no desde la renovación que lideró Miller Salazar. El estratega tendrá una nueva oportunidad para reivindicarse en la segunda fase, pero será la última.2. El Bombillo no habla castellano
En el segundo lugar está Ismael Rescalvo, quien volvió a fallar al mando de Emelec. El Bombillo acabó en sexto lugar, el segundo peor registro del técnico español por etapa desde que fue contratado en el 2019. Los aficionados eléctricos llegaron a insultarlo al punto que la Policía armaba zonas de exclusión en las gradas y ponerlo a salvo. Otros hinchas le dedicaban carteles poco amistosos en los graderíos. A pesar de este nuevo fiasco, Rescalvo se niega a renunciar, como esos políticos que dicen no aferrarse a los cargos mientras hacen todo lo posible por seguir en el puesto.1. Las malas apuestas de LDU
Y el ganador de este ranking es… la dirigencia de Liga de Quito encabezada por Esteban Paz, que apostó demasiado, casi ingenuamente, al proceso de Pablo Marini sin prever que el técnico uruguayo se doblegaría demasiado rápido. El charrúa, muy osco y circunspecto, en realidad no encabezaba un proceso sino un hiato sobre una base razonable (promover la cantera), pero sin un estilo de juego definido ni un liderazgo fuerte. Marini fue menos resistente que un helado al sol, pues abandonó a la U en la sexta fecha, tras recibir una paliza ante Goianense por la Sudamericana. Quizás fue bueno que no se aferrara al cargo, para volver a usar esa manida expresión, pero el daño estaba hecho y Liga debió buscar un nuevo DT y llegó el que estaba disponible, Luis Zubeldía, otro pésimo apostador al preferir la Sudamericana y dejar en segundo plano la Serie A, para perderlo todo. Bueno, queda una segunda fase para la reivindicación. Ojalá para los albos la suerte reparta mejores cartas. -

Imagen de Byron Castillo difundida por la Ecuafútbol, en su posteo por el Día de las Madres, este 8 de mayo del 2022. El caso de Byron Castillo se proyecta como uno de los episodios más intensos, polémicos e impactantes del fútbol de este siglo. Quizás en Ecuador, país acostumbrado desde el fraude de Moisés Cuero (1999) a que cada cierto tiempo aparezcan líos de papeles con los futbolistas, no se dimensionó adecuadamente por qué en Chile, y ahora en los medios del mundo, el caso de Byron, o Bayron, haya desatado tremendo escándalo.
La demanda de la Federación de Fútbol de Chile ante la FIFA para pedir nada menos que los puntos de los cotejos en que jugó Castillo y, como lógica consecuencia, el cupo en Catar 2022 en lugar de la Tricolor, fue un acto percibido en Ecuador como gracioso, exagerado e incluso poco realista. Pero la FIFA, este 11 de mayo, anunció que analizará el reclamo de Chile ¡e invitó a Perú a opinar sobre este asunto! O sea, esto se está volviendo más serio de lo previsto por aquellos que opinaban que solamente en la cancha se resuelven los partidos y que sugerían pedir a los chilenos que compraran televisores 4k para ver el Mundial.
Vamos a explicarlo por partes.
-El fútbol es política
La verdad del fútbol suele estar en la cancha, pero no hay que olvidar que el fútbol también es política y asuntos de escritorio. Basta una mirada por las redes de los medios de comunicación para admitir que Chile ha logrado posicionar eficientemente la idea de que algo extraño hay con Byron Castillo. Han circulado todos sus líos anteriores como el rechazo público de Emelec, su ausencia a última hora de una competencia internacional, documentos de Colombia y documentos del Registro Civil de Ecuador. Este último es clave, pues ahí se dice que no existe un acta de nacimiento en Ecuador.Para reforzar la idea, han aparecido notas que recuerdan que, desde el triste caso Cuero, los escándalos de alteraciones de identidades y de edades han sido tantos, que la Ecuafútbol debió contratar investigadores de la Policía para atrapar a los tramposos a lo largo de estas dos décadas. De hecho, justamente uno de esos detectives atrapó a Castillo.
Chile, en otras palabras, ha sido arrasador en su narrativa: Castillo nació en Colombia y nunca se nacionalizó ecuatoriano, sino que cambió ilegalmente de nombre y edad. Por eso, no debió jugar nunca en la Tricolor. Y desde Ecuador se ha contribuido a su pesar con esta narrativa, pues Castillo no ha dado declaraciones contundentes y más bien optó por lanzar memes en sus cuentas y reírse de los dirigentes chilenos, un suicidio de relaciones públicas. En efecto, al no colocar fotos o documentos en sus redes, Castillo más bien parece uno de esos personajes de antecedentes misteriosos, como el Capitán Nemo, de 20 leguas de viaje submarino.
-El fútbol es política, parte 2
Ecuador ha fallado en lograr que cale su postura legal más allá de la frontera, pero no por eso es desdeñable. La narrativa de la Ecuafútbol es que un juez constitucional ecuatoriano ordenó, luego de todos esos incidentes recopilados por Chile y la prensa, que Castillo goce de absolutamente todos los beneficios de un ecuatoriano por nacimiento, incluyendo portar pasaporte. Se ordenó que su acta de nacimiento se reconstruya.Claro, esto es un tema entre legal pero también de sentido común: Castillo ha vivido desde bebé en Ecuador (asumiendo que nació en Tumaco), nunca jugó para Colombia ni en Colombia y está absolutamente integrado a la identidad ecuatoriana. Todo esto sí está demostrado.
Castillo está muchísimo más integrado a Ecuador que, por ejemplo, el ango-chileno Ben Brereton con respecto a Chile. Brereton nació en Stoke-on-Trent, vivió su infancia y adolescencia en el Reino Unido, incluso jugó para las selecciones formativas de Inglaterra. Su castellano no era precisamente el que maneja la escritora Isabel Allende. Pero Brereton hizo los papeles para obtener la nacionalidad de su madre y jugar por Chile, como ocurre en todos los países del mundo.
En efecto, este esperpéntico drama se reduce a esta premisa: ¿Castillo debió nacionalizarse o bastaba la resolución del juez para jugar como ecuatoriano? Este cuestionamiento al protocolo de nacionalización es lo que la FIFA debe analizar. Y su resolución marcará un precedente.
La pregunta que brota es por qué Castillo no se nacionalizó antes. O mejor dicho, ¿por qué su familia o los dirigentes de sus equipos o los empresarios no impulsaron el trámite de nacionalización? En Ecuador y otros países, las nacionalizaciones por «servicios relevantes» son comunes. Pero, en este caso, iniciar el trámite de nacionalización implicaba reconocer que hubo dolo con los documentos previos y que en realidad era Bayron y no Byron; por lo tanto, Castillo hubiera sido suspendido, como le pasó a Alexander Domínguez, cuya anécdota contada por Claudio Borghi ha sido una obra maestra de la comunicación en favor del Chile. La tragedia de Castillo, talentoso jugador considerado el mejor lateral de la región, es que se ha pasado media vida esquivando esa sanción para, en una ironía del destino, terminar cayendo en la controversia más grande de los últimos años.
-El fútbol es política, parte 3
La FIFA no la tiene fácil. Nunca un equipo clasificado a un Mundial ha sido descartado por temas de alineaciones inadecuadas. Israel, que parecía tener el cupo asegurado para Suecia 1958, fue obligado a jugar una repesca con Gales y perdió. Y eso es todo. Ecuador, además, debe jugar el partido del acto inaugural con el anfitrión.El contexto no ayuda a tomarlo con calma. La FIFA, por un lado, debe hacer valer la reglamentación. Por el otro, la reglamentación no puede estar por encima del sentido común y las leyes. Tanto Chile como Ecuador tienen argumentos para que los abogados discutan y discutan y no se pongan de acuerdo. Es una enorme pena que el sonido de los seguros de los maletines reemplacen al sonido de los hinchas en los estadios. Quizás esto acabe en una sanción para Castillo, una multa para Ecuador y nada más. Pero, tanto en fútbol como en política, siempre hay espacio para las sorpresas, como lo indica que Perú entre en este baile de incertidumbre.











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