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Estas son las calificaciones que merecen los jugadores de Ecuador luego de igualar 0-0 (sí, otra vez no se anotó) con Japón. El cotejo, de preparación para el Mundial de Qatar 2022, se jugó este 27 de septiembre en el estadio Merkur Spiel-Arena de Dusseldorf.
–Hernán Galíndez, 8/10
Concentrado, resolvió las jugadas de peligro con la sobriedad que lo caracteriza. Ya ha quedado atrás la desastrosa fase en Chile que casi lo saca de circulación y ahora es el candidato número uno para el debut mundialista. En el segundo tiempo sacó tres pelotas de gol. Tampoco puede decirse que es mucho más de ‘Dida’, pero tiene ventaja.–Byron Castillo, 5/10
Activo en el arranque (aunque a veces parecía pasado de revoluciones), propuso mucho desde su costado, pero también transmitió dudas en la parte defensiva. Vio una tarjeta amarilla demasiado temprano al cortar un peligroso contragolpe japonés, cartulina que lo condicionó. También fue raro que perdiera en velocidad ante un par de rivales. En la segunda parte atacó menos y se dedicó a defender, para diluirse como miel en agua.–Jackson Porozo, 6/10
Lució mucho más acoplado que en el cotejo con Arabia Saudita, aunque de todos modos necesita un poco más de rodaje en la Tricolor para ser titular. Su inclusión en la nómina mundialista es cas un hecho y su titularidad dependerá de cómo se encuentren Torres y Arboleda. ¿Y León? Uf, qué dilema.–Piero Hincapié, 8/10
Un señor defensa. Esta vez defendió más por fuera de la zona de central. Lástima que no utilice más a fondo sus habilidades para el cabeceo ofensivo.–Pervis Estupiñán, 2/10
Cometió dos errores que alimentan el fuego de sus detractores o, mejor dicho, de sus odiadores que no paran de preguntarse si acaso los neerlandeses o los senegales habrían desperdiciado esos regalos. En realidad, este no fue un partido que recordará porque tampoco estuvo preciso en los centros y no marcó mayor diferencia. Sigue siendo el número uno en su puesto para el debut con Qatar.
–Jhegson Méndez, 5/10
Tuvo la tarea de suplir a Carlos Gruezo: marcó, recuperó y distribuyó. Aunque estuvo (casi) a la altura, parece que su destino será ser un buen suplente en el Mundial.–José Cifuentes, 3/10
No le fue del todo bien en la misión encomendada por el entrenador, pues le costó ser el enlace detrás del punta, además de cumplir con la contención. Logró un par de conexiones con Romario, pero nada más. Es seguro que será titular únicamente si Alan Franco se cae, aunque todo dependerá del módulo. Pero sí estará en Qatar.–Ángel Mena, 4/10
No estuvo tan acertado en los pases, aunque es verdad que por derecha ofrece más claridad que otros jugadores. Cuando salió al minuto 75, se perdió por completo la generación de ataque por ese costado. Fue valiente que defendiera a Enner en la rueda de prensa.–Moisés Caicedo, 7/10
En esta ocasión fue la aduana del medio campo, pero es extraño que ya no aporte con dribles y una mayor conducción de la pelota. Es como si hubiera decidido especializarse en destruir y filtrar. Obviamente, será titular en el debut mundialista.–Romario Ibarra, 8/10
Se convirtió, para sorpresa general, en el jugador más desequilibrante de los últimos amistosos. Rápido y atrevido, lo mejor de Ecuador pasó por sus botines. Una pena que no regresó para el segundo tiempo por un golpe.–Michael Estrada, 2/10
Aunque su poder anotador fue inexistente, intentó destacarse sin pelota, haciendo diagonales y arrastrando marca con sus jugadas sorpresivas. Lo malo es que hasta sus compañeros se sorprendían y el esfuerzo se desperdiciaba.–Enner Valencia, 0/10
¿Ni de penalti? ¿En serio?–Jeremy Sarmiento, 3/10
Es verdad que su técnica es depurada, pero solo fue una sombra en comparación a lo que mostró Ibarra 45 minutos antes.Los demás, sin nota
–DT Gustavo Alfaro, 5/10
Consolida su fórmula favorita de tres volantes. Hizo cinco cambios en relación al cotejo con Arabia Saudita y pudo tomar nota de quiénes sirven mejor para determinadas funciones. El equipo hizo circular la pelota y tuvo velocidad, sin por eso controlar la pelota más tiempo que el rival. El déficit sigue pasando por la definición. Ante el naufragio de Enner, quizás sea mejor usar a este delantero como extremo y optar por otro 9. Es fácil decirlo pero otra cosa en hallar al hombre gol cuando estamos muy cerca del debut. A ver cómo resuelve Alfaro este problema. -
Estas son las calificaciones que merecen los jugadores de la Tricolor luego de igualar 0-0 con Arabia Saudita, un equipo que jugará el Mundial de Qatar. El partido amistoso se realizó este 23 de septiembre en el estadio Nueva Condomina de Murcia, España.

Equipo titular de Ecuador ante Arabia Saudita. Foto: @LaTri -Alexander Domínguez, 7/10
Pasó de vacaciones en el primer tiempo y solo apareció para sofocar dos errores de sus propios defensores. En el segundo tiempo, mostró una parada de mérito al cierre del cotejo. No se notó el bajón del que tanto se habla cuando tapa en LDU.-Ángelo Preciado, 5/10
Comenzó transmitiendo inseguridad, pero se fue acomodando con el paso de los minutos y en general se mostró sólido en la marca. Prefirió defender en lugar de atacar (esta fue la orden) pues estaba muy pendiente del 10 de Arabia Saudita, con quien tuvo algunos duelos. Debido a esto, Gonzalo Plata casi siempre afrontó sus jugadas en solitario, sin la ayuda de su socio natural.-Jackson Porozo, 4/10
Demostró que es un central con proyección y que aún no está para ser titular. Por ahí, al inicio del partido, casi comete un blooper con un pase hacia Domínguez que pudo acabar en desastre. Sufrió demasiado cuando quedaba expuesto. Algo logró entenderse con Hincapié, pero con Preciado hubo un divorcio evidente que afectó en la salida por derecha.-Piero Hincapié, 7/10
Fue el patrón de la retaguardia y será titular en Qatar. Un tropezón suyo, que un saudita no pudo aprovechar, fue su único yerro. Un cabezazo suyo casi se convierte en gol.-Pervis Estupiñán, 7/10
Ese absurdo incidente con el saque de manos y la amarilla no debe repetirse nunca más. Fuera de eso, su proyección por la izquierda fue abundante pues, además de su potencia, pudo entenderse con Romario Ibarra para que Ecuador disfrutara de mucha amplitud de ataque por esa zona. Todavía no logra ser tan fino en todos los pases, pero le hizo una estupenda habilitación para gol Michael Estrada. También perdió algunos balones. Es notable que su paso del fútbol español al inglés lo está transformando en un jugador más dinámico. Pero, si alguno gusta, aún podemos llamar a Pineida.-Carlos Gruezo, 7/10
Esta vez su tarea fue básicamente defensiva y rindió. En el segundo tiempo se lanzó más al ataque y estuvo a punto de anotar. Sorprendió su salida al minuto 67, cuando el entrenador cambió de módulo y sacrificó a este relojito.-Moisés Caicedo, 4/10
Comenzó como un eficiente recuperador y filtrador de balones, y muchas de las jugadas que Enner arruinó nacieron de sus botines; pero se fue diluyendo ante la marca del rival y perdió protagonismo. Es un cazador nato y se nota su jerarquía, pero esta vez la presa se le escondió en el tramo final.-Alan Franco, sin nota
Estaba realizando un buen partido, pero una lesión lo sacó a los 27 minutos.-Gonzalo Plata, 4/10
Movedizo y potente, de todos modos se destacó en algunos momentos pese a que los socios por su costado no lo ayudaron. A ratos, fue mucho drible y poca efectividad.-Romario Ibarra, 8/10
Damas y caballeros, aquí está el dueño del costado izquierdo. Se dio modos para desbordar, arrastrar marca y colaborar con la ofensiva. Este Romario necesita a su Bebeto, pero Enner se niega a aparecer.-Enner Valencia, 3/10
Como suele ocurrir, Enner buscó anotar por todos los medios posibles y, como suele pasar, no acertó ni una sola vez. Por momentos, dio la impresión de que la ansiedad obnubilaba sus decisiones, como las de rematar colocado en lugar de disparar con fuerza, o viceversa. En un par de jugadas pudo haber pasado el balón a sus compañeros, pero también es verdad que el resto del equipo lo busca mucho en lugar de probar otros caminos, y eso genera más peso en Enner. En definitiva, las maravillas que este delantero hace en Turquía no logra repetirlas en la Tricolor.-José Cifuentes, 7/10
Le costó meterse en el partido al entrar de emergencia, pero acabó tomando la posta a Moisés Caicedo y fue uno de los baluartes del segundo tiempo, beneficiado sobre todo por los cambios del módulo táctico.Los demás, sin nota. Pero en general aportaron para arrinconar a Arabia Saudita. Como comentario, queda claro que Ángel Mena está llamado a ser el enganche y que se debe aprovechar su sociedad con Byron Castillo.
-DT Gustavo Alfaro, 6/10
Quizás fue algo desconcertante que Ecuador comenzara el duelo con tres volantes de contención y un solo delantero, tomando en cuenta que los sauditas, tradicionalmente, resisten y buscan el contragolpe. Pero hay ideas interesantes en esta decisión: Preciado entró de titular en lugar de Castillo, por ejemplo, porque la prioridad ante Senegal y Países Bajos será defender la banda derecha. mostrar solidez desde el inicio.Alfaro comenzó con un 4-3-3, con la idea de presionar desde arriba. Luego, desde el minuto 65, se pasó a un 4-4-2, con dos puntas y un juego frontal, directo. Ecuador tuvo más tiempo la pelota y generó casi todas las opciones de gol. Fue el dominador del cotejo y en este aspecto no hay reproches.
El gran (eterno) problema, en todo caso, es la falta de gol y, para Alfaro, que Ecuador no anote le ocasiona una enorme presión por el delantero. Apenas acabó el partido y las redes se llenaron de sugerencias, la ‘Tuka‘, el otro Cifuentes, Fidel, Reasco (que estaba en la banca), Campana y un largo etcétera. A 58 días del debut con Qatar, es complicado pretender que un ariete por fuera del proceso encajará perfectamente, mágicamente, en la idea táctica. Pero, en cambio, no llevar una alternativa causará críticas y minará la credibilidad del cuerpo técnico. A ver cómo Alfaro termina de resolver este angustiante dilema.

Moisés Caicedo, en su cotejo del 23 de septiembre. Foto: @LaTri -
‘Cazadores de utopías imposibles – El camino de Ecuador a Qatar 2022’ es más que el testimonio de lo que el entrenador argentino Gustavo Alfaro vivió, sintió y pensó a lo largo de las últimas eliminatorias al Mundial. Aquí, el lector, tanto el futbolero como el neófito, puede percibir la estructura espiritual y académica de un entrenador de fútbol de alta competencia sudamericana, en especial de uno de la envergadura de Alfaro que, a pesar de su cartel, siempre ha debido luchar para demostrar que está a la altura de las expectativas. Y ahí está su primera lección: la búsqueda de conocimiento debe ser incesante.
Este libro, curiosamente, constituye un perfecto reflejo del equilibrio que Alfaro espera plasmar cuando envía a un equipo a la cancha. Aunque estas casi 230 páginas son esencialmente un relato particular y narrado en primera persona, el lenguaje no cae en la vanidad ni abunda en los adjetivos. Hay emotividad cuando rememora los triunfos de la Tricolor, pero sin bajar a la cursilería ni a las frases populistas. Hay revelaciones y explicaciones sobre decisiones duras tomadas en el camino, como la de excluir jugadores, pero sin condena ni daño contra nadie.
En lo formal, Alfaro optó por la claridad y la concisión, lo cual otorga a la narración la fluidez de un reportaje. Ayuda mucho el ordenamiento de los capítulos, cortos y casi todos enfocados en un partido de la eliminatoria, a modo de bitácora. Y hay sabrosos aderezos, como las citas (Alfaro evoca tanto a Sábato como a Dostoievski, a Michael Jordan como a León Gieco, entre otras muchas y variadas fuentes de inspiración), el set de fotografías y textos del entrenador brasileño Tite y de personalidades cercanas a Alfaro. El ritmo es placentero y la lectura parece convertirse en una amena conversación que transcurre al calor de un café.

Foto tomada del Instagram de Gustavo Alfaro. El libro también cumple con otro de los requisitos que Alfaro siempre procura obtener de sus jugadores: la versatilidad. ‘Cazadores de utopías imposibles – El camino de Ecuador a Qatar 2022’, en efecto, también puede leerse como un sustancioso manual sobre el liderazgo, pero edificado desde la experiencia. El adiestrador argentino demuestra que un líder necesita formación, constancia, atender a detalles y, por supuesto, un profundo apego a los valores propios.
Y un líder tampoco se olvida del resto. Por eso, aunque Alfaro escribió este libro, se siente que en realidad ha construido un relato colectivo, que junto a él están jugadores, directivos, amigos, empleados, familiares, aficionados y hasta rivales. El fútbol siempre ha sido una obra colectiva y Alfaro estampa su firma -y su corazón- en nombre de todos.
‘Cazadores de utopías imposibles – El camino de Ecuador a Qatar 2022’ es editado por Planeta. Está disponible desde el 15 de septiembre.

















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